Construyendo el ciber-troll – Psicopatía, sadismo y bajos niveles de algunos tipos de empatía

Traducción al español y revisión de Lucia Hernandez-Pena, resumen original escrito por Jamie Knowles y la Dra. Nicola Gray

Referencia del estudio original:

Sest, N., & March, E. (2017). Constructing the cyber-troll: Psychopathy, sadism, and empathy. Personality and Individual Differences, 119, 69-72.

Resumen:

Antecedentes y objetivos

Internet es un vehículo cada vez más popular para socializar y comunicarse, y esto ha dado lugar a nuevas formas de comportamiento antisocial online (en internet). Una de estas formas de comportamiento antisocial online se conoce como ‘trolling’. El trolling online es el acto de provocar deliberadamente a otros mediante el engaño y el comportamiento dañino en internet, lo que a menudo provoca conflictos, reacciones fuertes a nivel emocional y la alteración de la comunicación (Hardaker, 2010). El objetivo principal del trolling suele ser divertir al propio «troll» (Sest & March, 2017). Investigaciones anteriores han sugerido que el impacto negativo del trolling en las víctimas es más grave que los comportamientos antisociales tradicionales y puede tener un impacto más duradero en la víctima (Park, Na, & Kim, 2014). Por lo tanto, es importante que la investigación trate de comprender los factores que hacen que las personas realicen comportamientos de trolling online.

Este estudio estaba interesado en analizar los factores que predecían la participación en conductas de trolling online. En concreto, estaban interesados en cómo los rasgos psicopáticos, el sadismo (la tendencia a obtener placer infligiendo dolor o sufrimiento a los demás), la empatía afectiva (la capacidad de experimentar, interiorizar y responder a las emociones de los demás) y la empatía cognitiva (la capacidad de reconocer y comprender las emociones de los demás) podrían predecir la implicación en conductas de trolling online. Los investigadores hipotetizaron que niveles más altos de rasgos psicopáticos y sadismo predecirían significativamente la participación en conductas de trolling. También hipotetizaron que los niveles más bajos de empatía afectiva y empatía cognitiva predecirían la participación en conductas de trolling.

¿Qué hicieron?

Los investigadores de este estudio reclutaron a 415 participantes de entre 18 y 67 años (63% mujeres, 36% hombres, 1% otros). Durante el experimento, se pidió a los participantes que completaran

  • Una medida de conductas de trolling llamada Evaluación Global del Trolling en Internet (Global Assessment of Internet Trolling en inglés, siglas: GAIT; Buckels et al., 2014) que pide a las personas que completen un cuestionario (autoinforme) sobre sus niveles de trolling online.
  • Una medida de rasgos psicopáticos llamada subescala de psicopatía del cuestionario corto de tríada oscura, “Short Dark Triad – Psychopathy Subscale” en inglés (Jones & Paulhus, 2014). Este cuestionario contenía nueve preguntas que pedían a las personas que informaran sobre sus niveles de diversos rasgos psicopáticos.
  • Una medida de sadismo denominada Escala Breve de Impulsos Sádicos, “Short Sadistic Impulse Scale” en inglés (O’Meara, Davies y Hammond, 2011). Este cuestionario consta de 10 preguntas que evalúan conductas y actitudes sádicas.
  • Una medida de empatía llamada Cociente de Empatía (Empathy Quotient en inglés, siglas: EQ; Baron-Cohen & Wheelwright, 2004) que pide a los individuos que califiquen sus niveles de empatía cognitiva, empatía afectiva y sus habilidades sociales.

A continuación, los investigadores calcularon las puntuaciones de los participantes en cada uno de los cuestionarios y analizaron si las puntuaciones en las medidas de psicopatía, sadismo y empatía podían predecir las puntuaciones de los participantes en la medida de trolling.

Resultados

Los investigadores del estudio descubrieron que los niveles de psicopatía y sadismo de los participantes predecían significativamente la participación en comportamientos de trolling en Internet. Esto significa que los individuos con niveles más altos de rasgos psicopáticos y niveles más altos de sadismo eran más propensos a informar de que participaban en comportamientos de trolling online.

Curiosamente, tanto la empatía afectiva como la cognitiva también predijeron la participación en conductas de trolling online, pero no de la misma manera. Los niveles elevados de empatía afectiva (ser capaz de sentir las emociones de los demás y responder a ellas) predijeron negativamente la participación en conductas de trolling online. Esto significa que cuanta más empatía afectiva tiene una persona, menos probable es que se involucre en conductas de trolling online. Por el contrario, los altos niveles de empatía cognitiva (ser capaz de reconocer y comprender las emociones de los demás) predijeron la implicación en el comportamiento de trolling en Internet. Esto significa que cuanta más empatía cognitiva tenga una persona, más probable será que se involucre en comportamientos de trolling online.

¿Qué significa?

Este estudio pretendía ver cómo los rasgos psicopáticos, el sadismo, la empatía afectiva y la empatía cognitiva predecían la implicación en conductas de trolling online. Como predijeron los investigadores, los niveles altos de rasgos psicopáticos predijeron una mayor implicación en conductas de trolling online. Los investigadores creen que la impulsividad, la búsqueda de emociones y la naturaleza insensible de los individuos psicopáticos actúan como motivadores centrales para participar en comportamientos de trolling online.

También confirmando la hipótesis original de los investigadores, los altos niveles de sadismo predijeron el comportamiento de trolling en Internet. Este hallazgo sugiere que el comportamiento de trolling online a menudo está motivado por el placer de infligir dolor y sufrimiento a otros online (Buckels, Jones, & Paulhus, 2013).

La forma en que la empatía predijo el comportamiento de trolling online fue especialmente interesante. Como hipotetizaron los investigadores, la empatía afectiva fue un predictor negativo de la conducta de trolling. Esta relación negativa entre la empatía afectiva y el trolling sugiere que los «trolls» no sienten ni experimentan la experiencia emocional de sus víctimas. Es probable que éste sea un aspecto crucial del trolling, ya que si los trolls sintieran empatía con su víctima y sintieran las emociones negativas que están infligiendo, sería menos probable que mostraran ese comportamiento.

Contrariamente a lo que hipotetizaron los investigadores, la empatía cognitiva predijo positivamente la perpetración de conductas de trolling online. Este hallazgo sugiere que los «trolls» suelen tener un alto grado de empatía cognitiva y pueden reconocer y comprender fácilmente las emociones que experimentan sus víctimas. Es probable que ser capaz de reconocer y comprender las emociones que experimentan las personas en Internet permita a los trolls 1) desarrollar métodos eficaces para enfadar, avergonzar o disgustar a sus víctimas; y 2) permitirles determinar si han conseguido manipular emocionalmente a su víctima.

Conclusión

Este estudio demostró que el troll prototípico suele tener un rasgo alto de psicopatía y sadismo, una empatía cognitiva alta y una empatía afectiva baja. Parece que las personas que intentan provocar y molestar a otros en Internet pueden comprender cognitivamente la angustia emocional que causan a través de su comportamiento de trolling sin empatizar con el sufrimiento emocional de su víctima.